El cofundador de Ethereum, Vitalik Buterin, recientemente emitió una advertencia alarmante sobre la inteligencia artificial (IA), calificándola como una fuerza potencialmente dominante en el planeta.
L’IA, un riesgo para la humanidad?
A diferencia de los avances tecnológicos típicos, la IA representa una categoría aparte debido a su potencial para revolucionar la sociedad. Buterin compara su impacto con el de la imprenta o la rueda.
Sin embargo, destaca que si la IA no se controla, podría convertirse en una amenaza existencial, capaz de percibir a los humanos como una amenaza y resultar en consecuencias catastróficas, como la extinción de la humanidad.
Señala que la IA, al aumentar rápidamente su inteligencia, podría superar las capacidades mentales humanas y convertirse en la nueva especie dominante en el planeta.
“La IA es […] un nuevo tipo de mente que está aumentando rápidamente su inteligencia, y tiene serias posibilidades de superar las facultades mentales humanas y convertirse en la nueva especie suprema del planeta.”
Según Vitalik Buterin
IA y Humanidad: ¿Coexistencia o Dominación?
Buterin invita a considerar cómo sería la vida en un mundo gobernado por la IA. Hace referencia a la serie “Culture” de Lain Banks, donde los humanos coexisten con poderosas IA.
Esta visión del futuro ofrece longevidad, salud y entretenimiento, pero a un costo potencial de pérdida de control humano.
Esto plantea una pregunta crucial sobre nuestra futura coexistencia con la IA: ¿seremos verdaderos socios o simples visitantes en un mundo dirigido por la inteligencia artificial?
Las soluciones propuestas por Vitalik Buterin
Para contrarrestar este riesgo, Buterin sugiere integrar interfaces cerebro-computadora (Brain-Computer Interfaces, BCI) con el objetivo de ofrecer a los humanos más control sobre las formas de cálculo y cognición basadas en la IA.
Según él, este enfoque reduciría la “comunicación bidireccional en bucle” entre el hombre y la máquina de segundos a milisegundos, garantizando así que los humanos tengan un cierto grado de control sobre el mundo.
Buterin también recomienda una “intención humana activa” para orientar la IA en una dirección beneficiosa para la humanidad, enfatizando que la maximización de las ganancias no siempre conduce a los humanos por el camino más deseable.