La Agencia de Control Financiero de la República de Kazajistán anunció en su página web que había confiscado equipos de minería a mineros no registrados. En total, el equipo está valorado en más de 100.000 millones de tenge, la moneda oficial de Kazajstán, lo que equivale a unos 194 millones de dólares. Muchas explotaciones mineras han dejado de funcionar.
Esta información procede de un informe publicado hoy por la autoridad reguladora de Kazajistán. El objetivo del informe era hacer un balance de la industria minera de criptomonedas (del país). El informe se publicó después de que la autoridad informara de que se realizarían inspecciones de las operaciones mineras en su suelo.
Para entender mejor el contexto, es importante saber que Kazajistán era un semillero de mineros, especialmente desde que China prohibió la minería de bitcoin en el verano de 2021. De hecho, ante esta prohibición, muchos mineros se trasladaron a Kazajistán. Movimientos confirmados por el aumento significativo de la tasa de hash de bitcoin en Kazajstán poco después de la prohibición china.
Si en su momento el gobierno de Kazajstán se mostró satisfecho con estas nuevas llegadas, las autoridades dicen ahora algo completamente distinto.
¿Por qué Kazajstán está cambiando su posición respecto a la minería de criptomonedas?
El gobierno asumió abiertamente que quería aprovechar el aumento de la cuota de mineros en su territorio por el “flujo de dinero que esto generaría”.
Un año después, parece que el balance es muy diferente. En su informe, la agencia de control financiero de la República señala las disfunciones causadas por la actividad de minería de criptomonedas y, en particular, de bitcoins, especialmente cuando se lleva a cabo de forma ilegal. De hecho, según la agencia, las actividades ilegales relacionadas con la cripto minería han dado lugar a riesgos que constituyen una amenaza para la seguridad económica del país.
¿La causa?
Escasez de electricidad, así como interrupciones cada vez más frecuentes del suministro eléctrico.
El regulador afirma que no menos de 51 explotaciones mineras ilegales han cesado sus actividades y han sido sancionadas.
En general, se les acusa de :
- no notificar el inicio de su actividad a las autoridades
- conectarse ilegalmente a las fuentes de energía
- establecimiento en zonas económicas especiales sin autorización
- por no pagar sus impuestos
- desperdiciar y/o revender electricidad para fines mineros
- vender a terceros el excedente de electricidad de determinadas explotaciones mineras sin licencia
- utilizando equipos de minería de bitcoin de contrabando (de China, Singapur, Corea del Sur, Turquía, Georgia).
Ante la presión de las autoridades, 55 explotaciones mineras ilegales han optado por cesar su actividad.
Kazajstán, que solía acoger a los mineros de bitcoin y a las empresas de criptomonedas, está adoptando una postura más dura con ellos. En 2021 ya había entrado en vigor un impuesto sobre la minería de criptomonedas.
“En general, las medidas adoptadas no sólo contribuyen a frenar el crecimiento del consumo de electricidad, sino también a liberar capacidad energética.
Agencia de la República de Kazajistán para el Control Financiero
Gracias a estas medidas, el consumo diario de electricidad en el país ha disminuido en 600 megavatios/hora”