Llega la hora para Sam Bankman-Fried. Casi un año después del anuncio de la quiebra de FTX y Alameda Research, el juicio de este último debería comenzar el próximo 3 de octubre. Sin embargo, aún quedan detalles por resolver, como la composición del jurado que será responsable de juzgar los actos de SBF.
Los fiscales consideran que las preguntas de los abogados de SBF al futuro jurado son intrusivas
La tensión aumenta y los fiscales no quieren dejar nada al azar. Mucho menos la composición del jurado que deberá condenar o absolver a Sam Bankman-Fried. En consecuencia, quieren limitar el alcance de las preguntas de los abogados de este último.
En un documento presentado al juez a cargo del caso, los fiscales explican las razones por las cuales las preguntas de los abogados de SBF deberían ser limitadas para garantizar la integridad del próximo juicio.
En primer lugar, explican que “varias de las preguntas propuestas por SBF son intrusivas”. De hecho, los abogados de SBF desean saber la opinión de los futuros jurados sobre la actividad de ‘altruismo efectivo’, las donaciones políticas y su capacidad para comprender los trastornos de comportamiento.
Por ejemplo, los abogados de SBF tienen la intención de preguntarles si consideran condenable dar dinero a candidatos políticos o grupos de presión para defender sus intereses. Según los fiscales, estas preguntas “constituyen un intento apenas velado de hacer avanzar la idea de que SBF buscaba mejorar el mundo a través de su riqueza”.
Agregan que esta estrategia, si bien es legítima durante el juicio, no tiene lugar en esta etapa preliminar de composición del jurado. Por ejemplo, los fiscales consideran que “insinuar ante el jurado que el acusado padece un trastorno de atención solo serviría para presentarlo de manera favorable incluso antes del inicio del juicio”.