La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) podría intensificar su labor de lobby a favor de la regulación de las monedas estables. Según Michael Barr, vicepresidente de la FED, la falta de regulación podría ocasionar rápidamente un riesgo para la estabilidad económica de Estados Unidos.
A principios de agosto pasado, la FED anunció la implementación de varias medidas para reforzar la supervisión de los bancos involucrados directa o indirectamente en actividades relacionadas con las monedas estables.
Al mismo tiempo, desde hace varios meses, el banco central estadounidense también ha estado trabajando para comprender las monedas digitales de los bancos centrales (CBDC, por sus siglas en inglés). De hecho, la FED publicó el año pasado un informe sobre los beneficios y desventajas de una CBDC.
Además, con los eventos en Oriente Medio, el Congreso de Estados Unidos ha expresado recientemente su preocupación por la emisora del USDT, Tether.
Con todos estos elementos, la desconfianza de las instituciones estadounidenses hacia el crecimiento de las monedas estables se está exacerbando.
La FED busca regular las monedas estables
Michael Barr explica que “cuando un activo está vinculado a una moneda emitida por un gobierno y se utiliza como medio de pago y reserva de valor, adquiere la confianza del banco central”.
Según él, este simple argumento debe permitir a la Reserva Federal “asegurarse de que las ofertas de monedas estables funcionen dentro del marco de una supervisión prudente federal adecuada para que no amenacen la estabilidad financiera ni la integridad del sistema de pago”.
Esta voluntad de regulación está acompañada, evidentemente, de un deseo de avanzar en la emisión de una CBDC. Sin embargo, Michael Barr asegura que la FED solo avanzará con un claro respaldo ejecutivo y una legislación de autorización del Congreso estadounidense.
Finalmente, destaca que las investigaciones actuales sobre las CBDC se centran principalmente en la arquitectura para su desarrollo. La FED busca comprender cómo se mantienen, se aseguran y se verifican los activos en la cadena de bloques. Además, también busca profundizar en los diferentes modelos de tokenización y custodia existentes.
En cualquier caso, la actividad de la Reserva Federal de Estados Unidos está inevitablemente vinculada a la existencia de la cadena de bloques y las criptomonedas. ¿Para bien o para mal? La pregunta sigue en el aire.