La plateforme Base, desarrollada por Coinbase como una solución Layer 2 en Ethereum, se enfrenta a una tormenta mediática después de lanzar públicamente un token que perdió casi el 95 % de su valor minutos después de alcanzar un máximo impresionante. Con el nombre de “Base is for everyone”, el token se generó a partir de una publicación en la red social on-chain Zora, que convierte automáticamente las publicaciones en tokens. El entusiasmo inicial solo lo llevó a una capitalización de 17 millones de dólares antes de desplomarse por debajo de los 2 millones de dólares, lo que provocó la indignación de la comunidad.
Base comparte una memecoin… sin mucho éxito
La caída según se informa fue causada por la venta masiva de tokens por parte de los tres mayores poseedores, quienes tenían el 47 % de la oferta en sus manos. Estas ventas momentáneas generaron más de 666 000 dólares en ganancias para estas billeteras, según el análisis de Lookonchain. Este evento fue percibido por muchos usuarios como un “rugpull”, y algunos acusaron a Base y Coinbase de promocionar una memecoin sin suficientes advertencias.
Desde entonces, Base is for everyone ha recuperado un poco y ahora tiene una capitalización de poco más de 11 millones de dólares.
La defensa de Base: un “contentcoin”, no un proyecto oficial
Ante la controversia, Base ha querido aclarar su posición: este no es un token oficial. En una respuesta por correo electrónico, un portavoz señaló que Base no ha lanzado ni vendido este token, enfatizando que la publicación original generó automáticamente el token a través del mecanismo de Zora.
El token se presenta en Zora como una “experimentación” en el marco de un concepto llamado contentcoin, una nueva forma de interacción entre el contenido y la tokenización. Las advertencias legales dejaban claro que este token no estaba afiliado a Base ni a Coinbase, y que no se debía esperar ningún rendimiento.
Base recibió 10 millones de tokens como “creador”, con el compromiso de nunca venderlos. Las tarifas generadas se destinarán por completo a subvenciones para los desarrolladores de la red.
Una falta de transparencia en el centro de las críticas
Sin embargo, estas precisiones no han sido suficientes para calmar la ira de los usuarios. El lanzamiento del token, sin una contextualización clara ni una advertencia visible al momento de la compra, fue considerado un riesgo irresponsable por parte de una entidad respaldada por una empresa cotizada en bolsa.
Abhishek Pawa, fundador de AP Collective, habla de una “ejecución desastrosa” y una “comunicación catastrófica”. Según él, la idea de contentcoin podría ser prometedora, pero su implementación apresurada y la falta de educación han llevado a una total incomprensión por parte de los operadores. Por su parte, Jesse Pollak, creador de Base, ha mantenido su postura, enfatizando la naturaleza experimental del proyecto.
Muchos usuarios están de acuerdo en que este mensaje explicativo debería haber sido publicado antes de compartir un enlace para la compra. Hasta ahora, Base no ha respondido a estas críticas, dejando a la comunidad en espera.