Donald Trump lanza una cuarta colección de tarjetas NFT, ofreciendo varias opciones y paquetes a los compradores por un precio de $99 por tarjeta.
Un compromiso cada vez más marcado a favor de las criptomonedas
Este nuevo esfuerzo de Trump para promover sus NFT no es simplemente un negocio; forma parte de una estrategia más amplia para fortalecer su imagen como un defensor de las criptomonedas. En un gala en mayo pasado, en honor a los coleccionistas de su tercera serie de NFT, Trump declaró su intención de posicionarse como el ‘campeón de la industria de las criptomonedas’ en la Casa Blanca, al mismo tiempo que acusó a los demócratas de representar una amenaza para este sector.
Una separación clara entre las ganancias de los NFT y los fondos de campaña
Es interesante destacar que los fondos generados por la venta de las tarjetas NFT de Trump no están destinados a financiar su campaña política. A diferencia de las donaciones tradicionales de campaña, las ganancias de esta venta de NFT van directamente en los bolsillos personales de Trump. Según sus últimas declaraciones financieras, el ex presidente ha recaudado más de un millón de dólares en criptomonedas gracias a sus actividades relacionadas con los NFT.
Al capitalizar el entusiasmo por los NFT y fortalecer su imagen como defensor de las criptomonedas, Trump no solo diversifica sus fuentes de ingresos, sino que también consolida su influencia entre los electores jóvenes y tecnológicos, al tiempo que intenta posicionarse como un líder que comprende y apoya las tecnologías emergentes. Esta doble estrategia, tanto comercial como política, podría resultar decisiva en su búsqueda de regresar a la presidencia en 2024.