Un cofundador del fondo de inversión Three Arrows Capital (3AC), que se había declarado en quiebra hace más de un año, acaba de llamar la atención tratando de escapar de Singapur. De hecho, después de negarse a cooperar con las autoridades de Singapur, Su Zhu ha sido arrestado.
El arresto de Su Zhu en Singapur
A pesar de la prohibición del regulador local de los mercados financieros de Singapur, Su Zhu y Kyle Davies, el otro cofundador de Three Arrows Capital, anunciaron a principios de año el lanzamiento de un proyecto en el ecosistema de blockchain y criptomonedas.
Concretamente, lanzaron un exchange de criptomonedas llamado OPNX bastante particular, ya que ofrece a los usuarios la oportunidad de operar con las deudas de otras plataformas de intercambio en quiebra.
Este exchange ya ha sido denunciado por la Autoridad de Regulación de Activos Virtuales (VARA) en Dubái. La institución le reprocha graves incumplimientos regulatorios y le impuso una multa de $2.7 millones en agosto pasado.
Ahora, es uno de sus cofundadores, Su Zhu, quien llama la atención al intentar huir de Singapur. Fue detenido por la policía singapurense cuando ya estaba a punto de abordar un avión en el aeropuerto de Singapur.
Este arresto está relacionado con la quiebra de 3AC, ya que el liquidador de la empresa, Teneo, indicó que había recibido una orden de arresto contra el exdirector. La razón es simple: Su Zhu se negó a colaborar con la justicia en el marco de una investigación sobre la gestión de la liquidación.
Se espera que este arresto resulte en una condena de cuatro meses de prisión para Su Zhu. Por su parte, Kyle Davies aún no ha sido detenido ya que actualmente se encuentra en paradero desconocido, aunque también pesa sobre él una orden de arresto similar a la de Su Zhu.
El regulador de los mercados financieros de Singapur afirma que ‘los dos cofundadores habrían engañado al regulador con un flagrante desprecio de los requisitos reglamentarios’.
El comportamiento de Su Zhu y Kyle Davies no sorprende, ya que parecen ser incapaces de cumplir con las normas establecidas. Ahora, al igual que Sam Bankman-Fried, los acreedores de 3AC probablemente esperan que finalmente sean llevados ante la justicia.